Mi linda tierra:
Te estoy muy agradecida por darnos alimentos, parques verdes, aire puro y fresco, sol y lluvia para que las plantas crezcan fuertes y radiantes, y un cielo lleno de estrellas brillantes para iluminarnos en la noche junto a la luna y su resplandor.
Creo que estas muy dolorida con nosotros, los seres humanos, por no cuidarte bien y hacer un mal uso de tu naturaleza. Te pido perdón personalmente si he maltratado tus raíces, ya que puedo oír tus gemidos.
A partir de ahora me comprometo a cuidarte. Intentaré cultivar la tierra con abono orgánico, no desperdiciar agua en casa, no echar basura en el mar ni en los bosques, ahorrar energía y reciclar todo lo que esté en mi mano. Así espero que estés un poco más feliz.
Hasta pronto, madre Tierra.
Rosineide María Dos Santos
G-I (M)
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